Finales de Junio

Cuando llegamos al aeropuerto de Colonia, respiramos tranquilas, pero también empezamos a recolectar los momentos vividos. Junto a nuestras maletas, el paraguas de Praga nos acompañaba. Así podríamos tener un recuerdo del viaje o decir que estuvimos en un hotel de gran lujo (aunque sólo fueran unos minutos).

El volver a Alemania, fue volver al Mundial. A las banderas alemanas y de otros países en las ventanas, a las calles llenas delante de los televisores...

Creo que vi más fútbol que nunca. Como estaba en Alemania, vi varios partidos de la selección local. Con alemanes y sin alemanes... Los alemanes estaban cada vez se lo creían menos. Su selección que antes, en los partidos anteriores al mundial, perdía sin remedio, ahora apuntaba a campeón... Los alemanes se orgullecían de ser alemanes, algo que hasta entonces no lo hacían.

Y yo, a su vez, con la selección española. Fuí a ver el partido contra Francia con un alemán y un colombiano. En el curso de alemán apoyaban a España, hasta los franceses creían que iba a ganar España. Pero no fue así...

No me gustaba el fútbol, pero iba a los partidos de Alemania. Durante el partido, no me concentraba demasiado en el partido, si no en el ambiente, en los gestos de los alemanes...

Tras el partido Alemania-Argentina, los alemanes llenaban las calles. Algunos borrachos y no tan borrachos, en distintas partes de la ciudad, cada vez que me veían gritaban "Deutschland!". Sin duda, creían que yo era argentina. Ese día me había vestido de color azul y blanco, como la bandera argentina... Y yo era neutral....

Ese mismo día, empecé a perder la voz. Se convirtió en mi primer resfriado o enfermedad en Alemania. Llegué a pasar el duro invierno sin problemas, y tuve que enfermar en pleno verano...